Cuando tienes en orden tu dinero, puedes tomar mejores decisiones y reducir considerablemente el riesgo que toda inversión conlleva. Por muy “segura” que se vea una información, debemos recordar que toda inversión tiene un posible riesgo de perder, muchas veces por variables que no dependen de uno mismo.
El año 2020 fue un gran ejemplo para esto. Nosotros (junto a mi esposa), como inversionistas, pensábamos que los bienes raíces eran inversiones infalibles y que siempre rentarían lo que habíamos estimado. Grave error. Con la llegada de la pandemia por el Covid-19, perdimos buenos arrendatarios, tuvimos vacancia, tuvimos que negociar menores valores de arriendo mermando considerablemente nuestra rentabilidad, no pudimos generar las altas ganancias en época de verano, y en paralelo, continuamos pagando los dividendos correspondientes.
¿Qué es lo bueno que pudimos sacar de todo esto? Que en ningún momento perdimos dinero, simplemente dejamos de ganar.
Por si no lo sabías, las pérdidas impactan mucho más que las ganancias. Si hoy tienes 100 (unidades) y ganas un 50%, entonces tendrás 150. Pero si pierdes el mismo 50% te quedarás con 75 (de igual manera si primero pierdes el 50% y luego recuperas el 50%). Debes evitar perder dinero a toda costa, o como dice Warren Buffet: La regla número 1 del dinero es no perder dinero, y la regla número 2 es nunca olvidar la regla número 1.
¿A dónde quiero llegar? Es que incluso si ya comenzaste a invertir, debes tener controlada tu situación financiera, eso implica
- Contar con un presupuesto
- Tener más ingresos que egresos
- Formar tu fondo de emergencia (de 3 a 6 mese de ingreso acumulado)
- Pagarte a ti mismo primero o ahorrar
- Destinar una parte de ese ahorro para invertir
- Con ese capital para invertir, INVERTIR.
¿Por qué no perdimos dinero? Porque el día de mañana, si tenemos vacancia, simplemente dejaremos de ganar el ingreso por conceptos de arriendo, pero el dividendo sale del monto destinado para invertir.
Una regla que nos establecimos, es mantener un nivel de ahorro tal, que incluso si todas nuestras propiedades estuviesen vacías, de igual manera podríamos pagar los dividendos con nuestro ahorro. O sea, dejamos de ahorrar, pero no perdimos (llámese pedir dinero prestado para pagar los dividendos)
Tener bajo control tus finanzas te permite vivir más tranquilo/a y reducir el riesgo. Invierte, primero que todo, en ti, y eso implica, en tener bajo total control tu situación financiera.
Víctor Sánchez Segura
Coach en Finanzas Personales
Autor de los libros: Libertad Financiera ¡Ahora ya! – Coaching Financiero – Conceptos Financieros
www.victorsanchez.cl